Nico Botta, el motociclista sanvicentino que logró unir Alaska con Ushuaia

Hace algunos años Nico partió con su sueño a cuestas hacia los EEUU. Viajo con lo que tenía, compró una moto en el país del norte, y casi sin hablar nada de inglés comenzó a rodar su sueño. Y tan perseverante, pasando por miles de situaciones, conociendo a personas que marcaron su vida e hicieron propio el sueño de Nico, logró la primera parte del aquel sueño que por muchas noches no lo dejaba dormir. Nico llegó a Alaska.
Una vez lograda esa primera etapa, comenzó a descender para volver a su San Vicente natal. Vaya desafío. Su moto, el enorme sueño, y su gran perseverancia. Y también lo logró. Atravesó Canadá, EEUU (donde tuvo que trabajar 6 semanas y demorar el retorno porque solo tenía 200 dólares y no alcanzaba ni para el combustible); cruzó por México, Nicaragua, Panamá (siempre durmiendo en camping para moteros, contando con la colaboración de amigos, haciendo alguna “changa”); hasta que llegó al continente sudamericano y su amada Argentina, ingresando a La Quiaca donde lo esperaban su padre y algunos amigos.
Cuando la geografía ya le resultaba más próxima y familiar, en la ciudad de Rafaela, unos 100 moteros lo esperaban para escoltarlo a su San Vicente natal, siendo recibido cálidamente por toda la ciudad y recorriendo en caravana sobre el autobomba de Bomberos Voluntarios en centro de la ciudad.
Pero a pesar de esa inmensa felicidad, internamente Nico sabía que le faltaba una parte. Él sueño completo era llegar a Ushuaia. Algo que muy pocos pudieron hacer.
Pasada la Pandemia, pero con algunos viajes en el medio junto a su compañero (hermano le llama Nico) Troy, y naturalmente su pareja Caro (a la que define como la mejor copiloto del Mundo), Botta emprendió hace algunas semanas la segunda parte de su histórica travesía. Y claro, nuevamente lo logró.
Con mucha emoción pudimos observar en las redes sociales el momento en donde Nico, a bordo de la moto que lo acompañó en esta epopeya, pisan Tierra de Fuego para coronar sin dudas una historia de estas para contar y que duran para toda la vida.
Felicitaciones Nico querido, a disfrutar de este momento de felicidad plena. Que de tanto soñarlo, lograste hacerlo realidad…para siempre.
